En los últimos años, se ha observado un aumento significativo en los casos de niños con retardo en el desarrollo del lenguaje. Este fenómeno ha despertado preocupación en padres, educadores y especialistas, quienes buscan comprender las causas y las posibles soluciones. Aunque cada niño se desarrolla a su propio ritmo, la prevalencia de este retraso en comparación con generaciones anteriores ha llevado a muchos a investigar los factores subyacentes. A continuación, exploramos algunas de las razones que podrían estar detrás de este problema, así como el apoyo de ciertos especialistas a estas teorías.

1. Uso excesivo de pantallas

Uno de los factores más mencionados en estudios recientes es el uso excesivo de dispositivos electrónicos como teléfonos móviles, tabletas y televisores. Según la Academia Americana de Pediatría, el tiempo prolongado frente a pantallas en la primera infancia puede afectar el desarrollo del lenguaje, ya que estos dispositivos no ofrecen las interacciones cara a cara necesarias para fomentar la adquisición del lenguaje. 

El neurólogo infantil John Hutton, de la Universidad de Cincinnati, ha realizado investigaciones que muestran que los niños que pasan más tiempo frente a pantallas tienen menos actividad en áreas del cerebro relacionadas con el lenguaje. Hutton sugiere que el tiempo excesivo en dispositivos limita las oportunidades de los niños para participar en conversaciones y desarrollar habilidades comunicativas.

2. Menos interacción social directa

Otra teoría respaldada por varios especialistas es que el cambio en las dinámicas sociales ha reducido la cantidad de interacción verbal entre adultos y niños. El ritmo de vida actual, con padres que a menudo trabajan largas horas y confían en tecnología para entretener a sus hijos, ha disminuido el tiempo de calidad en el que se conversa, se leen libros o se juega de manera activa con los peques.

La psicóloga del desarrollo Patricia Kuhl, de la Universidad de Washington, ha encontrado que el contacto verbal frecuente con los cuidadores es crucial para el desarrollo del lenguaje. Los niños necesitan escuchar y participar en conversaciones regulares para absorber las reglas del lenguaje, aumentar su vocabulario y aprender a articular palabras. La disminución de esta interacción, dice Kuhl, puede ser una de las causas del retardo en el lenguaje.

3. Exposición insuficiente a conversaciones enriquecedoras

El lenguaje se desarrolla no solo por el simple hecho de hablar, sino por la calidad de las interacciones. Los niños necesitan estar expuestos a un lenguaje rico y variado para poder aprender de manera efectiva. La exposición a palabras complejas, estructuras gramaticales variadas y conceptos abstractos son esenciales para que los niños desarrollen un dominio más profundo del lenguaje. 

Sin embargo, en muchos hogares actuales, el lenguaje se ha simplificado o se han sustituido las interacciones reales por conversaciones más limitadas o incluso por la falta de diálogo. Especialistas como el pediatra Dimitri Christakis, conocido por su investigación sobre los efectos de la tecnología en el desarrollo infantil, señalan que los niños que no están expuestos a un lenguaje variado tienen más probabilidades de experimentar retrasos en su desarrollo verbal.

4. Factores ambientales y emocionales

Los factores emocionales también juegan un papel clave en el desarrollo del lenguaje. El estrés familiar, los problemas de salud mental en los padres o una falta de un ambiente estable pueden impactar negativamente el desarrollo lingüístico de un niño. Un entorno seguro y afectuoso es fundamental para que el niño se sienta lo suficientemente cómodo como para expresarse verbalmente.

El psiquiatra infantil Bruce Perry sostiene que los niños que crecen en ambientes estresantes o inseguros pueden estar más enfocados en la supervivencia emocional que en el desarrollo del lenguaje. En tales circunstancias, el cerebro prioriza otras funciones, lo que puede retrasar la adquisición del habla.

¿Qué dicen los especialistas?

Muchos especialistas coinciden en que no hay una única causa para el retardo en el lenguaje, sino una combinación de factores tecnológicos, sociales y emocionales. La mayoría subraya la importancia de limitar el tiempo frente a pantallas y aumentar la calidad y cantidad de las interacciones verbales con los niños desde una edad temprana. También es esencial prestar atención a las señales tempranas de retardo en el desarrollo del lenguaje y buscar intervención temprana si es necesario.

La terapeuta del lenguaje y especialista en desarrollo infantil, Mónica Berger, aboga por la importancia de la intervención temprana. Según Berger, “Si los padres y educadores reconocen que un niño no está alcanzando los hitos del lenguaje a tiempo, es fundamental trabajar con un especialista para desarrollar un plan que ayude al niño a ponerse al día.”

Conclusión

El retardo en el lenguaje en los niños de hoy puede estar influido por una variedad de factores, desde el uso excesivo de pantallas hasta la falta de interacciones verbales de calidad. Si bien algunos niños simplemente desarrollan el lenguaje a un ritmo más lento, la intervención temprana y los cambios en las dinámicas familiares pueden marcar una gran diferencia en el desarrollo lingüístico. Los especialistas coinciden en que los padres deben estar atentos y brindar un entorno rico en estímulos verbales para ayudar a sus hijos a superar cualquier obstáculo en su desarrollo del lenguaje.

Manos a la obra, no respondas por tu peque, permítele que se exprese, dale espacios para su comunicación y evita entenderle todo para que se vea en la obligación de emitir verbalmente una respuesta.